La enfermedad periodontal o periodontitis es una infección de los tejidos que soportan los dientes (coloquialmente se llama «piorrea»).
La placa bacteriana se acumula entre los dientes y esto daña a los tejidos y a los dientes, creando a la pérdida de soporte de los mismos.
En etapas avanzadas, la enfermedad periodontal puede provocar dolor y sangrado en las encías, movilidad de los dientes e incluso su pérdida.
La gingivitis o inflamación de las encías generalmente precede a la periodontitis.
Aunque no todas las gingivitis progresan a periodontitis, es conveniente, acudir o consultar a la minima señal.
En la etapa inicial de la gingivitis, las encías están inflamadas y sangran fácilmente durante el cepillado dental.
Los principales síntomas de la periodontitis;
- Halitosis o mal aliento
- Encías rojas o inflamadas
- Sangrado de encías
- Dolor a la masticación
- Sensibilidad de los dientes
- Movilidad de los dientes
- Retracción de las encías
El tratamiento, dependerá del grado de afección de soporte del diente, lo más importante es aprender y mantener una correcta higiene bucodental.
Se ha demostrado en estudios que las bacterias que provocan la periodontitis, aumenta la probabilidad de cáncer de esófago ( estudio llevado a cabo por investigadores del Centro Médico Langone de la Universidad de Nueva York -EE.UU. ).
La periodontitis provoca hipertensión ( estudio llevado a cabo por investigadores del Instituto Dental Eastman del Colegio Universitario de Londres -Reino Unido)
Hay que mantener un estilo de vida saludable y una buena higiene oral.